Los lápices Manley cuentan con una calidad superior con un pintado resistente a la luz. Su mina se desliza fácilmente por el papel proporcionando un excelente desprendimiento de color gracias a su alta pigmentación.
Hay muchos tipos de lápices de colores para niños, desde los lápices de colores escolares a los lápices de colores triangulares o lápices jumbo cada uno pensado para diferentes etapas de aprendizaje. Pintar con lápices de colores mejora las habilidades motoras de los más pequeños, fomenta la autoestima, desarrolla la inteligencia emocional, forma parte del aprendizaje y estimula la concentración.
Los lápices acuarelables permiten su uso tanto en seco como acuarelado. Lo ideal es usar un papel de acuarela que aporta mejor resultado. Primero se realiza el dibujo con el lápiz en seco, luego con un pincel humedecido en agua se acuarela directamente sobre el dibujo las zonas deseadas.
Los mejores lápices son aquellos que se adaptan al tamaño de la mano del niño y le permiten hacer la pinza de una forma más fácil. Hasta los 3 años los mejores lápices de colores son los de la gama Baby ya que tienen una mina muy blanda y un fácil agarre. Desde los 3 a los 5 aproximadamente los lápices triangulares son los más indicados, tanto en formato jumbo como los lápices Trimax como en formato standard como los Tri. A partir de esta edad ya pueden usar lápices de colores hexagonales normales.
Los lápices de colores permiten realizar dibujos con una gran variedad de tonos de colores, se pueden realizar gradaciones, mezclas o texturas a base de tramas de líneas cruzadas. Hay diferentes tipos de lápices que permiten resultados diferentes según la dureza de su mina. Alpino dispone en su gama de lápices acuarelables que al aplicar agua ofrecen un resultado muy similar a la acuarela o los lápices premium Color Experience con una mina muy suave que permite diferentes intensidades de pintado y colores muy intensos incluso con lápices de color pastel o metálicos.